Posibilidades de intervención quirúrgica
Tratamiento mínimamente invasivo
Toxina botulínica A (Botox)
La toxina botulínica A es una proteína bacteriana natural. Sin embargo, también es una neurotoxina.
El botox ayuda con la sudoración de las axilas y la reduce durante unos meses porque inhibe la estimulación de las glándulas sudoríparas. Dependiendo de la frecuencia de uso, las inyecciones deben repetirse cada 4-9 meses.
No es para mí. No quiero que me inyecten un veneno bajo la piel. La camiseta antisudor Laulas® se inventó exactamente por este motivo. No para impedir el flujo natural del sudor. ¡Es una función de refrigeración importante para nuestro cuerpo! Pero las embarazosas manchas de sudor se evitan completamente con laulas®.
Sin interferir en nuestro cuerpo
Tratamiento quirúrgico
Simpatectomía transtorácica endoscópica
Transección quirúrgica de los nervios responsables de la circulación del sudor.
Escisión local de las glándulas sudoríparas
Extirpación de la zona afectada de la piel junto con las glándulas sudoríparas.
Liposucción - aspiración de las glándulas sudoríparas
Una opción probada con médicos especializados. Pero, ¿de dónde debe salir entonces el sudor? De nuevo, ¿el peligro de una sudoración compensatoria en la espalda o en la cara? De nuevo, he leído informes de enfermos en los que ni siquiera una segunda succión resolvía el problema. Sin embargo, también hay muchos informes positivos sobre la liposucción.
Escisión de la glándula sudorípara para la sudoración axilar
Tenemos que sudar, pero no tanto. Pero, ¿debemos dejar de sudar por completo? ¿Y para siempre? He leído en informes de pacientes que a menudo hay que contar con una sudoración compensatoria. Primero debajo de las axilas y luego quizá en la espalda como sustituto.
laulas®
Déjalo correr
Eso es todo lo que he encontrado hasta ahora y me gustaría señalar aquí de nuevo que esta información personal sobre la sudoración NO sustituye al consejo médico.
El caso es que no he encontrado ninguna técnica de prevención del sudor que me funcione (de las que he querido probar). Por eso se me ocurrió la idea de no prevenirlo más, sino dejarlo correr. De ahí el nombre de nuestro producto: laulas®.
Pero dejarlo correr de tal forma que ya no se vea.
No es la solución a la causa (aún estoy buscando eso), pero es una solución maravillosa para la vida cotidiana. Podemos volver a levantar los brazos libremente.
